Con un verano que se perfila crítico por las altas temperaturas, la falta de lluvias y los primeros incendios en la región, Villa La Angostura fortaleció su esquema de prevención y respuesta ante emergencias ambientales.
Una de las medidas centrales es la instalación de una cisterna de 100.000 litros, provista por Parques Nacionales, destinada al abastecimiento de los helicópteros hidrantes que operan en los focos forestales. El montaje se realizó junto a Bomberos Voluntarios, Protección Civil, la Brigada de Incendios y fogoneros municipales.
En paralelo, el Municipio refuerza la campaña de concientización en playas y espacios turísticos. Las cuadrillas recorren los sectores más concurridos para recordar la prohibición de encender fuego y, cuando detectan fogones activos, ordenan su extinción inmediata y aplican las multas correspondientes.
Otra acción clave es la puesta en marcha de nuevas cámaras de monitoreo orientadas a la detección temprana de humo, instaladas en puntos estratégicos como Cerro Bayo, el río Correntoso y el basurero municipal. La cartelería preventiva y la entrega de folletería con recomendaciones completan el despliegue.
Con estas medidas, la localidad apunta a anticiparse a una temporada de alto riesgo y fortalecer su capacidad de respuesta en todo el corredor cordillerano.






