El presidente de la Nación, Javier Milei, junto a la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, firmó el decreto 37/2025, que moderniza el Reglamento General de la Navegación (REGINAVE) con el objetivo de simplificar trámites y promover la competitividad en el sector. Esta medida forma parte de la política de desregulación y simplificación administrativa impulsada por el Gobierno Nacional para reducir la burocracia, facilitar las operaciones de los argentinos y fomentar la libertad económica.
El nuevo reglamento, trabajado en conjunto con el Ministerio de Desregulación y Transformación del Estado, encabezado por Federico Sturzenegger, fue presentado por los ministros en noviembre de 2024. En ese momento, Bullrich destacó que esta reforma representa una eliminación de las trabas burocráticas, favoreciendo tanto a las pequeñas y medianas empresas (PYMEs) como a la competitividad del país. Según el presidente Milei, “¡Trámites burocráticos, afuera!”.
Entre los cambios más significativos que introduce el decreto se encuentran:
- Libertad económica y estándares internacionales: El decreto incorpora principios de libertad de contratación y certificaciones de Organizaciones Reconocidas y Sociedades de Clasificación internacionales (IACS), simplificando procesos en la construcción, reparación y modificación de buques.
- Régimen simplificado para embarcaciones pequeñas: Se establece un sistema especial para la construcción y certificación de buques de menos de 100 toneladas, permitiendo que las certificaciones sean realizadas por profesionales especializados.
- Simplificación en matriculación y transferencias: Se elimina la necesidad de obtener permisos estatales para matricular, desmatricular o transferir un buque, eliminando requisitos como los certificados de libre deuda.
- Actualización en cuestiones de personal: La habilitación del personal se digitaliza y se extiende la vigencia de los trámites. Además, se limitan las regulaciones al personal por razones estrictas de seguridad, eliminando obligaciones como la contratación obligatoria de serenos y restringiendo la necesidad de baqueanos a casos específicos.
- Modernización de la navegación deportiva: Las Federaciones Náuticas serán las encargadas de emitir carnets, extendiendo la vigencia de los permisos a 10 años, y se habilita la realización de actividades comerciales con embarcaciones deportivas.
- Reconocimiento de certificaciones internacionales: Se aceptarán las certificaciones internacionales sin necesidad de homologación en actividades como el buceo profesional y el uso de dispersantes para la explotación petrolera.
- Protección de zonas petroleras: Se crean zonas de seguridad para actividades de exploración y explotación petrolera.
Esta reforma no solo busca fomentar la producción y competitividad, sino también actuar como una política anticorrupción, ya que menos trámites significan menos oportunidades para la corrupción. Además, se espera que esta modernización beneficie a las PYMES, que históricamente han enfrentado cargas burocráticas onerosas. Con esta medida, el gobierno apuesta por un futuro más ágil, eficiente y competitivo para la navegación argentina.