Una situación “bastante crítica” es la que distingue a los ríos Limay y Neuquén en lo concerniente a la calidad del agua, según se aseguró este miércoles en la Legislatura, durante una exposición de la red multisectorial “En defensa de los Ríos”.
Andrés Rabassa, a cargo del área Medio Ambiente de la Defensoría del Pueblo de la capital neuquina, sostuvo que “la situación hoy en día es bastante crítica” en relación a la contaminación de los ríos producto de los vertidos cloacales.
Rabassa hizo hincapié en que los puntos de muestreo se ubiquen en la zona de descarga de las plantas porque son los que “indicarán la realidad del agua”, y que el muestrario que se implemente sea en forma constante. También aconsejó pensar no sólo en el concepto de contaminación sino además en la degradación de la calidad de las aguas.
En ese sentido, Luis Olarte (médico e integrante del Caesyp) opinó que los problemas a futuro en materia de salud están vinculados a enfermedades ya no agudas sino crónicas y pidió mayor control en el manejo de las sustancias químicas.
La comisión de Medio Ambiente, Recursos Naturales y Desarrollo Sustentable recibió a integrantes de la red multisectorial en el contexto de la resolución 918 de la Legislatura provincial, que solicita al Poder Ejecutivo un relevamiento de los efluentes de líquidos cloacales en toda la provincia.
Participaron el Defensor del Pueblo de la ciudad de Neuquén, Ricardo Riva, junto a especialistas del organismo, vecinos integrantes de la multisectorial y miembros del Consejo Asesor, Económico, Social y de Planeamiento de la ciudad de Neuquén (Caesyp).